
Lady GaGa lucía un vestido rojo, imitando el atuendo de la reina Elizabeth I, muy comedido y tapado. La joven neoyorquina interpretó Speechless, la canción que ha escrito para su padre Joseph que sufre una dolencia cardiaca y el que le ayudó a vencer su adicción a la cocaína antes de ser famosa. Una actuación espectacular, ya descendió desde el techo sentada en un piano. Miley llevaba una cazadora y pantalones cortos negros, pero se cambió para saludar a la monarca y se puso un elegante y escotado vestido naranja.
La monarca acudía al Royal Variety Show con su marido, el Príncipe Felipe de Edimburgo y se notaba que Blackpool había sufrido un montón de cambios desde la última vez hace más de cincuenta años en la que albergó el evento.
Además, en el acto participó Alexandra Burke, ganadora del Factor X británico del pasado año, quien lució su estomágo plano tras perder casi diez kilos. También cantó la actriz y cantante Betty Midler y entre los chicos destacaron Mika y el atractivo y elegante canadiense Michael Bublé
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